Cornuscopicamente hablando; sean derramados sobre tu ser, todos mis deseos de abundancia, amor y prosperidad.
Son aquellos siempre manifestados desde mi esencia hacia tu ser, tal como siempre y desde un principio te lo dije.
Ya que conjugados al unisono, se traducen en mucha felicidad... La alegría de vivir.
Nunca ha habido un deseo contrario a este aquí manifestado.