En torno a una mesita de café, a mi madre se lo conté

Contemplando distraído la gente que pasaba frente a mi, mientras jugaba con lo que quedaba de una deliciosa taza de café y un rico y buen frió vaso de agua. Sentía la tarde que caía sobre mi, disfrutando mi soledad, en aquel café ubicado en las laderas un hermoso centro comercial donde concurren y se dan cita todo tipo de personas.

Yo admiraba el panorama sin negarlo deleitándome con la belleza única de la mujer venezolana que merodeaba y caminaban, algunas apresuradas, otras paseando a mi alrededor, solas o acompañadas.

Muy cerca de mi mesita se sentaron dos damas, que al parecer tenían gran afinidad de amistad entre ellas, las cuales entre risas y palabras conversaban de cosas cotidianas, y como es normal me llamo profundamente la atención un segmento de esa conversación, la cual, cual Messenger la tratare de recrear:

Francis dice: si chica, porque ayer de verdad te estuve llamando y llamando y no me respondías, que fastidio chica

Luisa dice: No Francis, recuérdate que estaba con mi mamá, comentándole y hablándole de mis vivencias.

Francis dice: A tu mamá? –pero bueno vale siempre sales con eso.

Luisa dice: si, tú sabes que yo siempre hablo con mi mamá.

Francis dice: es un fastidio, de verdad lo digo.

Luisa dice: Que cosa es un fastidio para ti?

Francis dice: que todo andes contándoselo a tu mamá, eso de verdad me molesta mucho.

Francis dice: te agradezco que no lo vuelvas a hacer por el bien de nuestra amistad.

Francis dice: además no me gusta que le cuentes a tu mamá todo, que fastidio

Luisa dice: … (silencio)

Francis dice: que te paso Luisa, no te gustaron mis palabras?

Luisa dice: sabes Francis?, a todos los días y todo el tiempo hablo con mi madre, eso no lo puede cambiar nadie.

Luisa dice: Sabes porque?

Francis dice: No lo se. Dime porque?

Luisa dice: Porque no tengo madre, ella murió estando yo lejos de mi casa, y hoy sintiendo que ella esta muerta, me lamento en lo mas profundo y me entristezco, y ahora le hablo mucho, mucho, mucho; todo lo que no pude hablarle cuando estaba con vida, ya que para aquel entonces cuando ella estaba con vida yo pensaba como tu.

Francis dice: … (Lagrimas en sus ojos)

Enseguida noté que ambas terminaron su café y se marcharon juntas.

Querido lector, en base a mi experiencia donde yo estuve a minutos de perder para siempre a mi madre. Hoy cuento con base cierta lo que se siente el haber pasado por la idea de llegar a perderla, por ello te digo, si aun tienes a tu madre contigo.. anda ve y búscala, háblale de ti pídele consejos los cuales solo una madre sabe dar.

Por último digo esto que recita constantemente mi mamá.

Toma una flor le dije a una paloma y llevasela al ser que mas te quiera.

Pensando que se la llevaría a mi amada, mas mi sorpresa fue cuando esta la deposito sobre la tumba lugubre y fría donde yace mi madre inmaculada.